Viene del post sobre mis crónicas del viaje en Asia White Lotus Trip 05 de Emeshing.com
Nos levantamos a las 6:45h para estar media hora después desayunando en el hotel. El desayno bastante bueno, donde destaca el sabor espectacular de los mangos. Creo que es el mejor manjo que me comí en la vida... buenísimo. A continuación lo mejor es el café, que repito.Salimos del hotel con el conductor y el guía para dirigirnos a ver unos cuantos templos más...
Empezamos por la Tonle Om Gate, que es una de las pocas puertas del palacio que conserva las cabezas de los dioses y de los diablos aguantando la serpiente de la prosperidad. Además la puerta tiene también caras de budha sonriente.
Luego vemos el templo de Preah Khan Temple, con una entrada espectacular y, aunque no se conserva bien, es muy chulo. Es de los templos recomendables y de los que te sientes Indiana Jones al visitarlo. Resulta que el templo fue saqueado hace muchos años, y por esta razón la espada sagrada del rey que mandó construir el templo fue robada y en la actualidad se conserva e el museo de Myanmar.
A continuación fuimos al Neak Poan Temple que destaca no por el templo en sí, sinó por su espectacular acceso por encima del agua llena de flores de lotto. El palacio discurre por unos 5 lagos, con lo que es muy distinto al resto.
Luego fuimos al Ta Som Temple que, aunqu tampoco se conserva demasiado bien, tiene puertas espectaculares con budhas sonrientes.
A continuación visitamos el Krol Ko Temple que se conserva bastante mal.
Luego fuimos al Pre Rup Temple del siglo X, que también es de esos con una magia especial y con unas piedras rojizas distintas al resto.
Después fuimos a comer, quizás de los sitios donde comimos mejor, yo a base de gambas rebozadas con una salsa agriduclce espectacular...
Luego fuimos al Banteay Srei Temple, quizás el templo con mejores grabados, tanto que dicen que es el templo de las mujeres y la diosa Lamy
El último templo del día fue para ver el anochecer desde una montaña donde a lo alto se encuentra el Phnom Bakheng Temple. Desde arriba del templo se veían unas vistas incleibles de un lago, de la selva e incluso de algunos templos como el más conocido y porimero que vimos al llegar a Camboya, el de Ankor Wat.
No viemos bien la puesta de Sol, ya que las nubes, que no la lluvia, nos lo impidió. Así que nos fuimos a la piscina del hotel donde los niños disfrutaron mientras se ponía el Sol, las chicas se fueron a dar un masaje, y yo me quedé escribiendo postales...
Para acabar muy bien el día pedimos a los tuc-tucs que nos llevaran al Chanrey Tree, un restaurante muy fancy y recomendable, quizás con precios más occidentales. Todo muy bien, la comida y el vino argentino Malbec, excepto cuando nos han traido el cambio que creo que se habían equivocado expresamente para quedárselo en propina, lo que les ha costado buena parte la propina que sí se merecían.
Para volver hemos cogido de nuevo tuctucs para ir a dormir. Justo antes me pongo a escribir este post pues en caso contrario no tengo tiempo de relajarme para explicaros las aventuras de Emeshing por Camboya...
Estas crónicas continuaran mañana en el post Asia White Lotus Trip 07 de Emeshing.com
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