Nos levantamos más bien tarde, nos duchamos, y kedamos para desayunar juntos en el espectacular comedor-cocina de la casa. Desayunamos de coña junto a los anfitriones, y cogimos los dos coches en dirección al mercado de moda de la isla llamado Las Dalias.
Aparcamos en el mismo parking del mercadillo hippie Las Dalias a 3€uros el día, y leímos el cartel de:
"Como cada año, con el verano y los visitantes hacen aparición los carteristas y ladrones. Por favor vigilen sus bolsos y carteras."
"As every year, with the crowds of visitors, pickpockets also make their appearance. Please watch your handbags and wallets."
El mercado hippie de Las Dalias es enorme con infinidad de puestos de ropa y accesorios de todo tipo. Según un gran cartel en la entrada del mercado, el mercadilo está abierto los sábados de todo el año de 12h a 21h. Pero de Junio a Septiembre está abierto también los lunes de 19h a 1h, y también los martes de Julio y Agosto. Mientras que los domingos del mes de Agosto abre de 12h a 22h.
Mientras las chicas se recorrían los puestos del mercado de Las Dalias de uno a uno, creo que el shopping es su principal hobby, nosotros nos fuimos a uno de los bares a hacer una cerveza. El bar estaba protegido del sol y pinchaba un DJ para ambientar el local abierto.
Pedimos la cerveza "Isleña", que se promociona por se la única de Ibiza, pero en realidad se trata de cerveza importada de Holanda, aunque aseguraban importar la cevada y hacer su propia cerveza. Bueno es igual, la cerveza está muy buena y el diseño de la botella de aluminio está chula. Os recomiendo que la probéis si tenéis oportunidad.
Luego seguimos recorriendo el mercado, hasta que nos paramos de nuevo para un zumo natural. Adriana se tomó un zumo de mango fresquito, para soportar el calor.
Salimos del mercado y nos fuimos a comer a San Carlos, en un restaurante llamado Anita, en el que comimos a base de paredados y huevos con jamón y patatas. El restaurante era muy curioso pues sirve de base de correos del pueblo. Y es que en su interior concentra los apartados de correos del pueblo de San Carlos así como los buzones de sus habitantes.
Después de comer nos fuimos hasta Santa Gertrudis donde paseamos por una plaza muy bonita y tranquila con gran cantidad de terrazas. Mientras ellas miraban vestiditos y otros accesorios, nosotros nos sentamos en una de las terracitas a disfrutar del fresco mientras nos tomábamos algo.
Luego nos fuimos a duchar y ponernos guapos para irnos a cenar a un restaurante muy chulo y muy recomendable llamado Can Berri Vell ubicado en Sant Agustí. El restaurante estaba lleno, pero los ibicencos nos habían conseguido la nejor mesa. Destacar los raviolis rellenos de morcilla, la carne a la reducción de Pedro Ximenes y la lubina. De nuevo todo ello acompañado con un Rías Baixas.
Después del postre, donde yo comí demasiado chocolate, y de los cafés, el que llevaba el restaurante nos hizo una demo de las ginebras que tenía para hacer gin-tonics. A mi no me gusta el combinado, que dicen que es la bebida oficial a partir de los treinta y pico, pero mis amigos pidieron Gin Mare y Gin G'Vine con tónica de diferentes marcas: tónica Schweppes y tónica Fever-tree. La moda de esta bebida dará para otro post...
Y desde el restaurante Can Berri Vell se podía ver la iglesia de Sant Agustí des Vedrà:
To be continued on post Ibiza Kiwi's Project 5
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2 comentarios:
Qué bueno es ese mercado, se ve q pasasteis un buen día. ¿Y cuál de los gin tonics ganó? En Ibiza me han puesto varias veces el mejor del mundo, de G'Vine con Schweppes, piel de lima y bayas de enebro. Qué gozada...
Sí, qué gozada los gin tonics!!!!!, pero la Gin mare es bestial!!!
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