La primera crónica del que he llamado Canarias Trip la estoy escribiendo desde un Airbus A320 mientras estamos sobrevolando Valencia con destino al aeropuerto de Gran Canaria.
Esta mañana me he levantado a las 7h, aunque el vuelo no salía hasta las 11h, pero más que nada para ir con tiempo y con la previsión de encontrarme pollo de camino al aeropuerto.
He desayunado escuchando a The Libertines, uno de los grupos de los que hablaba ayer ver post Another car music change), y me he duchado escuchando la radio donde explicaban que Sarkozy había ganado las elecciones francesas por delante de Royal. La verdad es que me despertaba más afinidad la mujer, aunque no he seguido de cerca las alecciones. De Sarkozy me hizo gracia saber que estuvo dos décadas siendo el alcalde de Neuilly-Sur-Sienne, localidad pegada a Paris donde estuve "viviendo" durante algunos meses.
Ya tenía la idea de ir en mi coche al aeropuerto, pues la parada de taxi cercana a mi casa ya estaba empty. De camino a El Prat, y mientras escuchaba el recopilatorio The Best of Blur, había el predecible kaos, pero lo peor ha sido encontrar aparcamiento en el aeropuerto pues estaba todo full. Al final me he resignado a dejarlo en "la quinta forca", es decir en la quinta m.
El check-in ha sido rápido, y he decidido facturar la maleta para evitar los problemas en el control respecto a lo que llevo de desodorante, jabón, espuma de afeitar y after-shave. Pero la cola del control de equipajes era bestia, aunque avanzaba a buen ritmo. Por suerte no tan bestia como los 3/4 de hora de la semana pasada en la cola de taxi de Madrid-Barajas (leer post Madrid Fugaz en Emeshing Blog).
Como tenía tiempo he ido a un kiosko que tengo localizado para comprarme la revista Wired, pero oh sorpresa... El kiosko está cerrado, con todos los mostradores vacíos y con un cartel que pone algo asi como: "cerrado por traslado". Qué pena, porque era un buen kiosko-librería. Una vez hecho el check-in me he ido a otra libreria que conozco y ni rastro de Wired, pero encima la chica ni sabía de qué le estaba hablando.
Al final, y después de recorrerme parte del aeropuerto de El Prat he encontrado otro de los kioskos, más conocido por sus guías turísticas que por otra cosa, y he encontrado la Wired aunque la versión de Abril 2007, que ya me sirve porque no había tenido oportunidad de comprármela aun.
Del pequeño desayuno en forma de bocata vegetal y marisco, agua y café con leche poca cosa que comentar. Sólo decir que el volumen de guiris por metro cuadrado es muy bestia, y que se me han sentado detrás un grupo de kellis del airport que chillaban más que hablar, y me quedo con la expresión: "el pollo nos lo zampemos..."
Mientras aprovechaba por hablar por teléfono, el embarque ha sido por jardinera (para variar), y después de hacer un tour turístico de narices por las pistas nos han tenido un buen rato dentro del autobús esperando a que acabaran de realizar el repostaje de combustible del avión.
Por cierto estoy esperando que me traigan una chocolatina que he pedido, pero la azafata no se debe acordar...
To be continued soon
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1 comentario:
Esta chula la crónica, y lo bueno aún no ha empezado. Esperamos con ansias la segunda entrega jeje.
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