El tercer y último día en el Pirineo Aragonés empezó con el despertador a primera hora, para así poder aprovechar el día.
Nos levantamos a toda leche para poder avanzar las maletas y poder desayunar por último día en el buffet libre tan chulo del hotel Monasterio de Boltaña. Sí, aunque la cena no me acabó de convencer, el desayuno es bastante recomendable.
Después de desayunar como reyes, y acabar de hacer las maletas, bajamos a la recepción del hotel para el checkout.
Al salir del hotel primero sacamos la nive helada del parabrisas, y luego nos las tuvimos para colocar maletas y compras en el maletero, pero al final la ingeniería del espacio ganó.
Dimos una vuelta por el pueblo de Boltaña y el frío no ayudaba en salir del coche a recorrer el pueblo. En este caso destacaré la iglesia de Boltaña, y el que no encontrábamos la salida. Y es que, no sé si por las obras, pero es que todas las calles daban a la plaza principal o hacia callejuelas no muy recomendables para circular en coche, bueno quizá solo si querías estrenarlo con alguna esquina de piedra...
Luego nos dirijimos a Ainsa para hacer las últimas compras, y ver la bonita plaza y las cuidadas calles de día. El Sol hacía el paseo más agradable, pero era curioso comprobar que la escarcha seguía cubriendo las zonas donde el Sol aún no había llegado, a causa de la sombra de los muros del castillo o por la sombra de las calles.
Después de hacer algunos kilómetros nos fuimos hasta una bodega que ya habíamos visto a la ida, e hicimos una parada técnica para degustar sus vinos en una mini-cata. La bodega era Otto Bersué y de los que probamos nos gustó su vino tinto más cuidado y el blanco más suave. Precisamente el dueño de las bodegas nos recomendó comer en un restaurante de Barbastro, y allí nos plantamos en pocos minutos.
El restaurante Rincón se caracteriza por tener una carta muy extensa y cuidada para el menú, así que con 14€ por persona comimos muy bien, yo a base de risotto y carne.
Al salir de comer tomamos rumbo a Barcelona, con tan sólo una parada para poner gasolina en una estación de servicio aún en Aragón, antes de cruzar hasta Catalunya.
Hasta aquí el Boltaña Project 2010 que, junto a Tato&Tata, Adriana y yo nos lo hemos pasado genial!!!
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