Hoy he acabado de leer el libro Sábado de Ian McEwan. El libro me lo he leído muy rápido, puede que ayudado por las horas libres (entre espera y vuelo) que tuve el otro día en el viaje a Madrid (ver post Emeshing).
El libro en sí está bien, pero el autor tiene unos cambios increibles de temática que dispersan y despistan al lector, o almenos a mi. Pero en cambio tiene algunas partes muy entretenidas con una tensión que hace que se esté "a punto de romper la página".
En la contraportada del libro editado por Anagrama aparece la siguiente sinopsis de Sábado: "Henry Perowne es un hombre feliz. Es un reconocido neurocirujano y está casado con Rosalind, una abogada de un importante periódico. Ambos disfrutan de su trabajo, se quieren y quieren a sus hijos, un prometedor músico y una joven poeta. Es sábado, 15 de febrero de 2003, el día de las grandes manifestaciones contra la guerra de Irak. Henry se despierta, va hacia la ventana de su dor-mitorio y ve un avión en llamas que sobrevuela Londres muy bajo. Henry teme un accidente terrible, un ataque terrorista. Más tarde, escuchando la radio, sabrá que se trata de un aterrizaje forzoso. Y Henry volverá a dormir, y hará el amor con su mujer, y se irá luego a su partida de squash semanal. Pero la visión nocturna no ha sido sino el presagio de la realidad azarosa que irrumpirá en la plácida burbuja de su vida tan armoniosa..."
Esta en cambio es la portada de la versión inglesa con el título Saturday:
La verdad es que yo no conocía ni había leído nada antes de este escritor, así que explico algo de... Ian McEwan nació en Aldershot (UK) el año 1948, y es uno de los autores más prolíficos de su generación. Debutó con "First Love, Last Rites" (Primer amor, últimos ritos) en 1975, y con una colección de textos cortos titulada "In Between the Sheets" (Entre las sábanas). Su debut como novelista fue con "The cement garden" (Jardín de cemento), y siguió "The comfort of strangers", "The child in time", "The Innocent", "Black Dogs", The Daydreamer", "Enduring Love", "Amsterdam" y "Atonement".
En definitiva, puede que me esperara algo más de este libro, y quizás por esto no lo he encontrado muy bueno. Lo que sí es verdad es que no se trata de un libro redondo, pero en cambio tiene partes muy buenas que hacen subir la adrenalina hasta al lector menos entregado.
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