"la primera mitad del siglo XX fue testigo de un retroceso significativo de la globalización económica y, en consecuencia, del movimiento de personas entre países que esta conlleva. Los motivos de este retroceso son obvios, ya que aquellas décadas se vieron marcadas por una concatenación de tragedias sin precedentes a escala global y de reveses en la fortuna de las naciones. La lista, limitada solo a los principales eventos, incluye el final de la dinastía Qing, la última dinastía imperial de China (1912); la Primera Guerra Mundial (1914-1918); el fin de la Rusia zarista, cuando los bolcheviques alcanzaron el poder, lo que marcó el inicio de años de guerra civil que terminaron con la instauración de la URSS (1917-1921); la disolución del Imperio otomano (alcanzada finalmente en 1923); la inestabilidad política en la Europa de posguerra durante la década de 1920; el colapso de la Bolsa a finales de octubre de 1929; la consiguiente crisis económica mundial, que duró la mayor parte de la década de 1930; la invasión de Manchuria por parte de Japón (1931), el verdadero inicio de otra gran guerra; la toma del poder en Alemania por parte de los nazis (1933); la guerra civil española (1936-1939); la Segunda Guerra Mundial (1939-1945); una renovada guerra civil en China (1945-1949); el inicio de la Guerra Fría (1947) y la proclamación de la República Popular China por parte de Mao (1949). El retroceso de la globalización económica fue sustancial. La parte correspondiente al comercio en el PIB mundial cayó desde aproximadamente un 14 por ciento en 1913 hasta alrededor del 6 por ciento en 1939, y a solo el 4 por ciento en 1945."
from "Cómo funciona el mundo: Una guía científica de nuestro pasado, presente y futuro" by Vaclav Smil, Francesc Pedrosa Martín
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